Fidel del Ariguanabo

Cientos de corazones de San Antonio de los Baños guardan –como tesoros- historias relacionadas con las visitas del Comandante Fidel Castro a esta tierra de tabaco y frías aguas. Un cubano que conoció de “punta a cabo” su tierra y jamás desaprovechó la oportunidad de saber de su gente, de estar al tanto del funcionamiento de los centros estudiantiles o laborales, de corroborar cuánto se hacía por la sociedad y de vincularse directamente a los logros de una Revolución iniciada en 1868 que triunfó casi un siglo después con su fusil.

Hombres y mujeres son testigos de la presencia de Fidel en el Ariguanabo, la tierra de Eduardo Abela, René de la Nuez, Silvio Rodríguez entre otras personalidades que de seguro fueron parte de sus referentes. Pero lo cierto, con pruebas fehacientes, son sus visitas a tres centros que luego del paso de los años, ostentan con regocijo, el orgullo de ser puntos donde se le dio la bienvenida al soldado de las ideas.

El que más visitó

En uno de los límites de la Villa del Humor está ubicado el Centro Mixto Batalla del Jigüe, lugar que, hace más de cuarenta años, se fundó como ESBEC, iniciativa de Fidel Castro. Según nos comenta Estela Pérez, quien por aquel entonces era maestra, la escuela servía de termómetro a Fidel para conocer cómo debía funcionar el programa nacional de escuelas en el campo.

“La primera vez que visitó Batalla todos estábamos nerviosos, imagínate que llegara él era demasiado, fue una experiencia tremenda. Pidió que los maestros hiciéramos una fila por la entrada de la escuela y a cada maestro nos dio la mano; sus manos eran grandes y suaves…cálidas; un detalle inolvidable”- asegura Estela

“El aparecía en las tardes en su jeep, y para nosotros era reconfortante después de tanta tensión de trabajo. Se reunía con el claustro, conversaba y jugaba béisbol con los estudiantes en el patio; esa era su mayor afición, lo demostraba siempre.”

“Otra de las anécdotas, también en la escuela, fue cuando nos prometió que traería al presidente de Perú y así fue. En aquel entonces Alina Torres era la directora, trabajaban juntos, estaba al pendiente de cualquier detalle; puedo decirte más: un grupo de estudiantes de Batalla del Jigüe se escogió para modelar con el uniforme que hoy viste la enseñanza media superior y pedagógica en el país, o sea, alumnos de aquí fueron los primeros que llevaron los nuevos uniformes.  Sinceramente te digo, las tardes eran algarabía y el revuelo… eran las tardes de Fidel”- concluye.

Un sueño de Tres Mundos

Hacen exactamente treinta y dos años de la inauguración de la Escuela Internacional de Cine y Televisión (EICTV), otro de los lugares de San Antonio de los Baños, esta vez fundada por Fidel junto al escritor y periodista colombiano Gabriel García Márquez, el poeta y cineasta argentino Fernando Birri y el realizador y teórico cubano Julio García Espinosa.

Los sueños de cineastas latinoamericanos se hicieron realidad y la antigua escuela José Gervasio Artigas le cedió su espacio a esta oportunidad, y en un discurso Fidel expresó “Es la idea, de crear una escuela, de cine para América latina, es decir, para estudiantes latinoamericanos y del caribe. Debiera extenderse la idea de la escuela también para alumnos africanos o cualquier otro país del tercer mundo”

Pero gracias al impulso de Fidel Castro, el 15 de diciembre de 1986 surgía en San Antonio de los Baños la EICTV, que se ha convertido en uno de los referentes del nuevo cine, casa formadora de importantísimos directores, fotógrafos y guionistas de medio mundo.

En la inauguración una periodista norteamericana preguntó – ¿cuál era el interés de esa escuela? Su pregunta, recibió la respuesta de este hombre: “Claro que todos tenemos un interés…el mismo interés que tiene el comité de cineastas latinoamericanos, de eso hablamos nosotros en la clausura del Séptimo Festival; esto es una lucha por la liberación de nuestros pueblos, para liberarnos quizás de uno de los mecanismos más infernales con que cuentan los opresores: el monopolio de los medios masivos de comunicación”

El sueño de realizadores se materializó: aulas modulares se transformaron en mini estudios, salas de edición, laboratorios fotográficos, estudios de grabación de sonidos y de cine y televisión.

Volvía a sentirse la presencia de Fidel en la Villa del Humor, ahora defendiendo las raíces culturales de América Latina y el Caribe porque como él creyó cada pueblo debía forjar su destino y su historia de forma soberana. 

Ese día en el hotel…

Por el año 1992 los trabajadores del Hotel “Las Yagrumas” recibieron a Fidel en esta instalación rodeada de una rica vegetación boscosa, resguardada por las aguas del Río Ariguanabo.

Uno de los motivos del encuentro fue conocer sobre el funcionamiento del hotel, él había escuchado que Las Yagrumas era el barco insignia de la cadena Cubanacán. El hotel era pequeño y los trabajadores, en aquel tiempo muy jóvenes, se involucraron en todas las actividades emulativas obteniendo resultados positivos y destacándose en conmemoraciones de efemérides del año.

La ariguanabense Clara Elena Burrowes Luz Caballero, quien era trabajadora del hotel y Secretaria del núcleo del Partido, tuvo que responder a muchas de sus interrogantes. Él quería preguntarlo todo. Conversó durante un rato con el gerente Rogelio Rodríguez de la Torre a solas. Recorrió meticulosamente todo el hotel y antes de su partida saludó a los trabajadores y firmó en una hoja: “Pude apreciar con la calidad que ustedes trabajan, los felicito”

Clarita, a pesar de la emoción del día, recuerda las palabras de Fidel cuando se despedía: «Secretaria no crezca más que parece una palma real»

Fidel es Ariguanabo

El Cine-Teatro Círculo de Artesanos y el Instituto Preuniversitario de Ciencias Exactas “Mártires de Humboldt 7” fueron otras de las coordenadas del Comandante en San Antonio de los Baños. Allí dejó parte de su legado convertido en esperanzas para la Revolución Cubana, que jamás renunciará a los principios: marxistas, martianos y fidelistas.

Luego, el 22 de septiembre de 2001 regresó al Ariguanabo para alzar las voces de Cuba en una Tribuna Abierta de la Revolución. De su discurso recordamos: » ¡Nuestra independencia, nuestros principios y nuestras conquistas sociales los defenderemos con honor hasta la última gota de sangre, si somos agredidos! No será fácil instrumentar pretextos para hacerlo. Y ya que se habla de guerra con empleo de todas las armas, es bueno recordar que ni siquiera eso sería una experiencia nueva. Hace casi cuarenta años, cientos de armas nucleares, tácticas o estratégicas apuntaban contra Cuba, y nadie recuerda haber visto a un solo compatriota perder por ello el sueño.

«Somos los mismos hijos de ese pueblo heroico, con una conciencia patriótica y revolucionaria más elevada que nunca. Es la hora de la serenidad y el coraje. El mundo tomará conciencia y hará escuchar su voz ante el drama terrible que lo amenaza y está a punto de sufrir.

Porque “honrar honra” el pueblo ariguanabense rinde homenaje a un amigo cercano a siete años de su partida física. El héroe que, en su eterna condición de Comandante en Jefe, vela desde las alturas de la Sierra Maestra a esta tierra. Pasarán los años sin embargo, su presencia seguirá viva como páginas bautizadas de historias que se cuentan una y otra vez para no ser olvidadas.