Trujillo, el mejor

¿Por qué lo aseguro? Trujillo, como lo conocemos los artemiseños trabajó durante cincuenta años en la limpieza de varios lugares de este pueblo.

 

Por muchos años, las personas que madrugaban lo veían alegre, ágil y jovial, barriendo las calles de la Villa Roja, mientras recogía materia prima para entregarla como aporte de un cederista destacado del municipio.

 

Las calles por donde pasaba Trujillo siempre estuvieron limpias, porque él no entendía de labores incompletas y con orgullo sano se jactaba de ser el mejor, opinión con la que los ciudadanos de este pueblo estamos de acuerdo.

 

No porque escribo en pasado sobre este anciano que roza los noventa años de vida, pienso que se jubiló para descansar en el  hogar que tiene, otorgado por la Revolución, a quien mucho se lo merece. Ahora se dedica a curar enfermos con consejos sanos, la utilización de la medicina verde y mucho optimismo para vivir.

 

Desde estas reflexiones exhorto a los vecinos de Artemisa para que cuando vayan a cometer un acto de indisciplina social contra la higiene de este pueblo, recuerden que Rogelio Trujillo, entregó cincuenta años de su existencia a hacernos más hermoso el medio en que nos desenvolvemos y de esta forma más agradable la  vida.

 

Los trabajadores de Servicios Comunales tienen en Trujillo un ejemplo a seguir en el buen desempeño de su trabajo. No tenga duda, cuando cooperamos para que la ciudad en que vivimos esté limpia, demostramos tener cultura.