El bloqueo en la realidad cubana
Hablar de bloqueo en Cuba es tan cotidiano como caminar. Son pocos los escenarios que escapan de los daños provocados por esta política yanqui.
Un embargo, el más largo de la historia, que ha marcado la existencia de millones de cubanos, que nos golpea diariamente. A decir de nuestro
ministro de Relaciones Exteriores Bruno Rodríguez Parrilla “la economía cubana ha experimentado presiones extraordinarias que se manifiestan en la industria, la prestación de servicios, la escasez de alimentos y medicinas, y el deterioro del nivel de consumo y bienestar general de la población. El daño humano que genera esa política a todas las familias cubanas es tan imposible de cuantificar como enorme, cruel e inmoral. El bloqueo es un acto de guerra económica en tiempo de paz”.
Aunque el bloqueo total contra Cuba se oficializó el 7 de febrero de 1962, desde 1959 el gobierno estadounidense aplicó políticas de asfixia económica contra Cuba.
Durante 30 años la comunidad internacional se ha pronunciado en contra de esta política hostil. La Asamblea General de las Naciones Unidas, desde 1992, ha aprobado con creciente mayoría la Resolución “Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba”. A pesar del reclamo internacional se mantienen en vigor las leyes, disposiciones y prácticas que sirven de sustento al bloqueo.
Nuestro líder histórico Fidel Castro en más de una ocasión hizo referencia al significado real de este cerco: “El bloqueo es algo más que prohibir la venta de mercancías de Estados Unidos, impedir comprar o vender en Estados Unidos, es una feroz presión y una feroz persecución para evitar que nosotros hagamos operaciones comerciales de ningún tipo, y todo ese poderío inmenso está concentrado hoy contra nuestro país”.
¿Qué nos queda por hacer? Nada que no hayamos hecho ya: resistir a las adversidades. Seguir reclamando el cese del bloqueo, no doblegarnos ante la gran potencia del norte.
Más de 60 años nos han servido para crecer, para vencer obstáculos de todo tipo. Otra vez nos toca armarnos de valor, otra vez alzamos la voz y nos hacemos eco de las ideas del presidente cubano Miguel Díaz-Canel “Cuba no desistirá en su lucha contra el bloqueo, porque es ilegal, injusto, inhumano; constituye además una vergüenza para el mundo”.
