Primera medalla de oro olímpica de Latinoamérica

María Caridad Colon Ruenes, una morena cubana, nacida un día como hoy pero en 1958 en Baracoa, provincia de Guantánamo,  enviaba la jabalina hasta los 68 metros con 40 centímetros en su primer intento, con lo que se herejía como campeona olímpica, convirtiéndose en la primera latinoamericana en poder subir a lo mas alto de un podio en citas bajo los cinco aros.

Ese fue el momento cúspide de la carrera deportiva de esta humilde niña que comenzó la práctica del deporte en 1971 y ya en 1972 ingresó en la EIDE de la más oriental de nuestras provincias y dos años más tarde fue segundo lugar en los juegos escolares de 1974.

En 1975 llega María Caridad Colon a la ESPA nacional y asiste a un certamen en México, donde alcanza el primer lugar con un envió de 49 metros y 74 centímetros, con lo que es promovida a la selección de mayores.

Su evolución se hace notar en el memorial Barrientos de 1978, donde implanta record nacional de 60 metros y 62 centímetros, asegurando así su presencia en los Juegos Centroamericanos  y del Caribe de Medellín Colombia, donde alcanza el primer lugar con 63.40, record para los Juegos y nueva marca nacional.

En ese año además logra romper en dos ocasiones el record mundial juvenil, con lo que es elegida la novata del año en Cuba.

En 1979 es recordista Panamericana, en San Juan, Puerto Rico, con disparo de 62 metros y 30 centímetros, demostrando su estabilidad competitiva.

Pocos saben que en su resultado en Moscú 80, estaba lesionada, por eso le puso el alma a ese primer disparo que la condujo a la gloria.

Se recupera de la lesión y en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de 1982 organizados en  La Habana y Santiago de Cuba, domina la competencia, al igual que el siguiente año en los Panamericanos de Caracas, Venezuela, pero nuevamente las lesiones se interponen en su camino, no obstante participa en el campeonato mundial de Helsinki, Finlandia, donde no puede pasar de un octavo escaño.

Luego de un pequeño impas, se presenta en los Juegos Centroamericanos de Santiago de los Caballeros en 1986 y se alza con la medalla de oro, resultado que la motiva a seguir compitiendo en pos de llegar a los Juegos Panamericanos de Indianápolis 1987, donde concluye en la segunda posición.

Luego de su retiro del deporte activo, comienza una nueva vida, primero se gradúa de Licenciada en Cultura Física y labora en la dirección nacional del INDER, donde asume varias responsabilidades, entre ellas la de apoyar las actividades deportivas de niñas y jóvenes, no solo en Cuba, sino que en toda América, por lo que recibe el trofeo anual Mujer y Deporte, que entrega el Comité Olímpico Internacional.

Su fecunda labor en el Comité Olímpico Cubano y en la máxima dirección del INDER, la llevan a ser candidata al Comité Olímpico Internacional, donde es elegida y forma parte del mismo en la actualidad.

Sin dudas, una de las grandes atletas cubanas de todos los tiempos, María Caridad Colon.