Octubre nos devuelve a Camilo y Che

Se las ingenió la vida para unirles y la historia para eternizarles porque Camilo y Che siempre están de regreso. Como no estarlo, cuando la austeridad de uno y la sonrisa del otro se hicieron imprescindibles, para entender los derroteros del éxito en una generación justiciera y pasional como pocas.

 

Uno es el Quijote americano del siglo XX de estela replicada para el resto de los siglos, el otro es el más común que haya merecido grados de héroe. De ambos, el valor la pasión, la ternura.

 

Nunca  un par de miradas y un sinfín de acciones motivaron a creer tanto como las suyas.

 

Por ellos vive el hombre nuevo, un poco más allá del horizonte,  y aún se estampan rostros como iconografía de ideales y sueños.

 

Ofrecer algo más que el corazón, sirvió para que alguna mujer les suspire todavía, y todo niño vaya tras el bien siempre.