Estudio revela que partículas presentes en los aerosoles afectan la vida marina.

Estas partículas de aerosol tienen sus orígenes en volcanes, incendios forestales, polvo del desierto y la quema de combustibles fósiles y a menudo llegan a regiones oceánicas remotas, donde se depositan por precipitación o deposición seca.

 

En la investigación dirigida por la Universidad de Cornell se explica que una vez que las partículas llegan a los océanos, algunos metales resultan insolubles y caen al fondo, mientras que otros son absorbidos por diversas biotas, como el fitoplancton y las bacterias, que constituyen el 80 por ciento de la vida marina y actúan como circuladores de oxígeno y nutrientes en todo el ecosistema.