Obreros de hidráulica en tiempos de retos

Casi siempre suelen ser trabajadores anónimos a pesar de su labor compleja y trascendental, pues son los obreros hidráulicos quienes garantizan la calidad del agua que bebemos, la utilizada en la cría de animales y en el riego. Además, perforan y aforan pozos para uso agrícola, social e industrial.

 

De ahí que el 10 de agosto es una jornada para homenajearlos y reconocerlos, ya que en 1962 se creó en esa fecha el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INRH), y devino Día del Trabajador Hidráulico, efeméride que distingue el esfuerzo de quienes laboran en el sector.

 

Y los artemiseños tienen mucho de historia enlazada a los inicios de la revolución hidráulica; en Mariel se construyó la primera presa, Mosquito, como ejemplo de la voluntad impulsada por Fidel y su visión de futuro.

 

El INRH asume la protección de las aguas terrestres, las cuencas, los cauces naturales, las obras e instalaciones hidráulicas contra la contaminación, azolvamiento y otras formas de degradación y deterioro, así como el control sistemático de la calidad.

 

Artemisa cuenta con una Empresa de Aprovechamiento Hidráulico, la cual garantiza la calidad del recurso natural, y la Unidad Empresarial de Base (UEB) Perforación y Construcciones de Occidente, ambas con resultados económicos favorables.

 

Carlos Manuel Antela, director de técnica y desarrollo de la Empresa, refirió que en 2017 concluyó un proyecto de cuatro años con la Agencia de Colaboración Internacional de Japón (JICA) acerca del desarrollo y manejo de las aguas subterráneas que les dotó de herramientas para su evaluación.

 

Raúl Suárez, director general de la entidad, precisó como un paso importante para el uso racional del agua en Artemisa el montaje de hidrómetros (equipos para medir el volumen de agua consumida), en tanto la Ley No 124 de las aguas terrestres, aprobada este año, constituye un instrumento imprescindible para la mejor explotación de este recurso.

 

Para Francisco Guerra Madera, jefe de la cuadrilla de Artemisa de tal UEB, explicó que los principales trabajos realizados son la perforación de seis pozos en la desalinizadora – potabilizadora ubicada en Maisí, Guantánamo, y otros seis para un hotel que se construye en El Vedado habanero.

 

Tomado de Elartemiseño.