“Homenaje al bárbaro del ritmo”

Además de un innato sentido musical, estaba dotado con una fluida voz de tenor que coloreaba cada frase de sus interpretaciones. Fue maestro de géneros musicales, pero destacó en el mambo, el bolero y el son montuno.

 

Sin embargo, quizás lo que más perdura del “Bárbaro del ritmo” sea su particular de sentir  y de comunicar; nunca dejó de ser ese hombre de Santa Isabel de las Lajas.

 

Hoy le rendimos tributo, no solo a él, sino a su melodía que ha transcurrido de generación en generación, y lo ha situado en la cúspide de la cancionística, la música popular y el espectáculo en nuestro país.

 

La expresión corpórea, el porte, su característico vestuario, y la coreografía desarrollada ante el público eran elementos esenciales del Benny. ¿Quién en Cuba no recuerda viejas imágenes del “Sonero Mayor”, con su bastón, sombrero y anchos pantalones de tirantes, desinhibido y original, dirigiendo su orquesta con todo el cuerpo? Indudablemente su figura ha trascendido las fronteras nacionales de la mano de números como: Bonito y sabroso, Maracaibo, Castellano que bueno baila usted, y Cómo fue.

 

No se trata de un músico más, sino del más genial artista popular que ha existido en Cuba. Es símbolo, mito y leyenda. El “Bárbaro del Ritmo”, es lo máximo de la música popular.