Bolígrafo que corrige las faltas de ortografía

El aparato es ligero y no requiere necesariamente papel para funcionar. El objetivo del invento es que el aprendizaje no resulte un aburrimiento, sino una actividad entretenida y fácil, tanto para los niños como para los adultos. Por eso dicen que las ligeras vibraciones que produce el bolígrafo al corregir los errores son, en realidad, «buenas vibraciones».

 

El boli funciona con Linux como sistema operativo, y posee conexión Wi-Fi y sensores para controlar lo que el usuario escribe. Sin necesidad de cables expide la información a una tableta o un ‘smartphone’ para que analice la información. Funciona a baterías y puede conectarse a las redes sociales para compartir lo que esté escribiendo el usuario.

 

El bolígrafo no solo corrige la ortografía, sino que también tiene la función ‘caligrafía’, que corrige los trazos de las letras.