Informe forense desmiente el supuesto asesinato de joven iraní

Tras examinar los registros médicos del hospital, así como la tomografía computarizada del cerebro y los pulmones, los resultados del examen físico del cuerpo, la autopsia y las pruebas de patología, la muerte de Amini no fue causada por golpe en la cabeza o en los órganos y elementos vitales de su cuerpo, señala el reporte forense divulgado este viernes.

De acuerdo con el informe, la joven padecía de una enfermedad subyacente tras ser operada de un tumor cerebral de craneofaringioma, lo cual provocó que el 13 de septiembre, mientras estaba detenida en una comisaría de Teherán, perdiera repentinamente la conciencia y cayera al suelo, falleciendo días después.

A pocas horas de conocerse la noticia los medios occidentales promovieron una matriz de opinión, señalando que la joven fue asesinada por la Policía de la Moral, cuyos funcionarios la detuvieron por usar incorrectamente el hiyad (velo de uso obligatorio para las mujeres en Irán).

Las manifestaciones violentas se sucedieron durante días en la capital y otras ciudades, en protesta por el supuesto asesinato, las grandes transnacionales de la información mostraban reportes catastróficos del país, mientras Estados Unidos y algunas naciones europeas, amenazaron con nuevas sanciones.

El pasado lunes el ayatolá Seyed Ali Jamenei denunció que esas protestas son premeditadas y si no hubiera ocurrido ese caso, igual buscarían otro pretexto para generar inseguridad.

En ese contexto, el embajador de Reino Unido en Teherán, Simon Shercliff, fue convocado dos veces debido al apoyo a los manifestantes de algunos funcionarios diplomáticos y la atmósfera hostil generada en los medios de comunicación en lengua persa con sede en Londres, instigando la violencia.

Mientras, los medios de inteligencia iraní revelaron las declaraciones de dos espías franceses, detenidos en mayo pasado, quienes admitieron que se encontraban aquí para desencadenar “una revolución” en la República Islámica y derrocar al Gobierno.

Los ciudadanos Cécile Kohler y Jacqeus Paris, viajaron a Irán el 28 de abril como turistas, pero en un vídeo transmitido la víspera, Kohler admitió ser una agente de la Dirección General de Seguridad Exterior (DGSE), agencia de inteligencia exterior francés, equivalente al MI6 británico y la CIA estadounidense.

Tomado de PL.